Cada día, es más frecuente encontrar en nuestros hogares un sillón capaz de ofrecernos esa relajación que tanto necesitamos al final del día, para paliar los efectos del estrés, mientras vemos la televisión o leemos un libro.

Cierto es, que estos sillones suelen tener un cierto volumen que a veces supone una limitación para salones pequeños.

La tendencia con el paso de los años ha ido desplazando al tradicional butacón por un sillón relax, objeto de nuestro post de hoy. Por tanto, para diferencia ambos elementos, podemos decir que un sillón relax cuenta con un sistema que reclina el respaldo hacia atrás, a la vez que ofrece la posibilidad de elevar las piernas de la persona sentada en él.

A partir de este concepto, existen varias modalidades de  sillones relax en función de las necesidades de la persona:

• Sillones relax reclinables, con apertura manual

Estos sillones están compuestos por un respaldo reclinable y un faldón, que despliega y en el que se apoyan las piernas. Para abrirlos y reclinarlos, sólo es necesario un pequeño empujón de nuestra espalda hacia atrás, mientras apoyamos los brazos. 

Para volver a la posición inicial, debemos repetir la misma operación en el sentido inverso.

• Sillones relax reclinables, con apertura  mediante palanca

Este tipo de sillón incorpora un mecanismo de palanca en un lateral del mismo,que acompaña nuestro movimiento y nos ayuda a recostarnos en él. Tal como ocurría en el de apertura manual, el respaldo del sillón acompañará nuestro cuerpo en todo momento.

Para volver a la posición inicial, basta con ejercer peso sobre él. La particularidad de este tipo de apertura es que nos ayuda a la hora de regular el ángulo del respaldo respecto al del asiento.

• Sillones relax reclinables, con apertura motorizada

Este tipo de sillón funciona por electricidad a través de un adaptador conectado al  mismo. A partir de ahí, bien mediante un mando por cable o bien mediante una botonera colocada en uno de los laterales, la persona va reclinando el sillón en la posición deseada.

Por otra parte, estos sillones pueden ir provistos de 1 o 2  motores, de tal forma, que en el primer caso la función de elevar los pies y reclinar el respaldo la asume el único motor; en el segundo caso, el hecho de tener 2 motores independientes, cada uno asumirá una funcionalidad, lo que da más juego a la persona.

Dentro de los sillones eléctricos, podemos distinguir a su vez entre diferentes tipos atendiendo a sus prestaciones:

• Pared 0: Su nombre se debe a que permite colocarlo pegado a una pared, y sólo necesitaremos separarlo unos pocos centímetros de la pared para poder reclinarlo, ya que el asiente se desliza hacia delante conforme el asiento va hacia atrás. 

• Sillones relax elevadores: Este tipo de sillones también son denominados “geriátricos” porque la funcionalidad que les caracteriza, es la incorporación hacia delante para que la persona pueda levantarse sin problemas de una manera suave, agradable, alcanzando la posición casi vertical. Es por ello, que es un tipo de sillón relax muy recomendado para personas de edad avanzada y/o con movilidad reducida.  Además este tipo de sillón suele ir acompañado también de la funcionalidad del sistema de desplazamiento, que permite mover a la persona sin problemas y sin necesidad de moverse del sillón, lo que facilita esa labor a la persona que le atiende.

Es habitual en los sillones relax motorizados, encontrarnos con la posibilidad de incorporarles alguna opción más como el masaje vibrador, manta calefactora e incluso lámpara led.

Si por el contrario, bien por espacio o bien por razones de estéticas, estás buscando simplemente una butaca, en Nix Bedding te recomendamos 2 modelos que decorarán ese espacio que aún no consigues ocupar:

• Butaca orejera.

Las butacas orejeras son amplias a la par que cómodas. Dispone de un respaldo con la altura suficiente para proporcionar un buen apoyo de los hombros y la cabeza. Dispone de dos orejas en los lados del respaldo que permite quedarse dormido de forma cómoda ya que la cabeza tendrá un buen apoyo, evitando malas posturas que conlleven algún tipo de molestia muscular.

• Butaca nórdica

Si quieres darle a tu casa un toque decorativo nórdico, no pueden faltar en tu decoración unas sillas de estilo nórdico. 

Se caracterizan porque en su estructura predominan las patas de madera. Los asientos van revestidos de tela o cuero, terciopelo o tela suave, y están disponibles en una amplia variedad de colores, lo que resulta una idea perfecta para conseguir el ambiente deseado y ofrecerle el máximo confort y calidad.